Monday, July 27, 2009

Índice de Egocentrismo


El escuchar atentamente es algo que muchas veces no es fácil ni natural de hacer. Una habilidad natural en algunos, aprendida en otros. Pero aprendible y desarrollable para los que no nacimos con ese don.


En esto pensaba hace algunos días cuando, en el cumpleaños de un amigo, me senté a conversar con una mujer. Ella era bastante simpática, parecía inteligente, bonita. Hablaba bastante, cosa que en general no me molesta siempre y cuando venga de la mano de la capacidad de escuchar. Es decir, si habla mucho y sabe escuchar, bien. Si habla mucho y no escucha, mal. Tan simple como eso.


La cosa es que después de media hora de conversa yo creo que yo podría haber redactado su currículum mejor que ella misma, así como enumerarle muchas de sus cualidades, sus cosas virtudes y defectos. Y todo esto con detalles. Es decir, la mejor foto que se puede sacar de una persona en sólo media hora. Recordemos que hay una sola chance para causar una primera impresión, y ella estaba aprovechando el tiempo!


Si bien me daba cuenta durante este proceso que la conversación giraba sólo en torno a ella, yo pensaba que era una buena oportunidad de ejercitar mis skills de active listening, empatizando, haciendo preguntas, profundizando, cuestionando, etc…Y resultó en una conversación relativamente profunda dada la ambientación: al cabo de 45 mins cada uno emprendió su camino.


Y ahí surgieron los cuestionamientos: Efectivamente la conversación giró prácticamente todo el rato acerca de ella? O será percepción mía? Quizás me concentré tanto en escuchar que no me di cuenta cuándo la conversa era acerca de mí? Estaré algo perseguido con el tema? Quizás no me abrí yo? En fin, todo tipo de cuestionamientos sicoanalíticos interesantes pero quizás superfluos.

La respuesta a mis inquietudes de si era ella la egocéntrica o yo el enrollado llegó algunos días después cuando nos hicimos amigos en Facebook.


Facebook es impresionante: efectivamente el perfil de Facebook dice bastante acerca de la persona. Si antes eran los ojos el espejo del alma, hoy por hoy es Facebook. Fue en ese momento donde tuve una verdadera revelación, un insight casi profético que me mostró que ella definitivamente era una persona egocéntrica.


Ante tamaña inspiración tuve que validar mi hipótesis: hice una pequeña comparación con una muestra aleatoria. Tomé 10 amigos de Facebook, revisé sus perfiles y señores, mi teoría tiene validez científica.


Así que ahí va: Cuantas más fotos de perfil (“profile pictures”) acumula una persona, más centrada es en sí misma. Así de simple. Cuantas más fotos de perfil tiene una persona en Facebook es un reflejo de cuánto le importa si mismo. Y ojo que no hablo acerca de una “sana autoestima” o algo así, si no que de puro ego y poca capacidad de empatizar y/o interesarse por el resto. Podría ir más allá y insinuar que existe una correlación (inversamente proporcional) entre la tranquilidad espiritual de una persona y la cantidad de fotos de perfil que tiene en Facebook… pero eso sería ir demasiado lejos ;)


La evidencia científica: en mi muestra aleatoria de 10 personas cada una tenía entre 1 y 16 fotos de perfil, todos salvo 2 personas tenían menos de 10 fotos y la mayoría tenía menos de 5 fotos.

Es decir, en promedio la gente tiene 3 o 4 fotos y uno que otro con 10. Y claro, mi nueva amiga era la comprobación empírica para mi teoría… la variedad de fotos de perfil que evidenció su egocentrismo.


Así que, estimados lectores, si bien no creo que Facebook sea la verdad revelada creo q a ratos puede aportar información de quién es una persona.


Algo que me falte? Ah sí… cuántas fotos de perfil tenía esta persona?


Tan sólo 62 fotos. Juzgue ud mismo.