Friday, November 24, 2006

"El Tata"

Hace algunos años, y cuando yo aún era alumno de Ingeniería Civil, me tocó un profesor muy particular. El ramo era "Eletricidad y Magnetismo" ("Electro"), uno de los ramos físicos más complicados. Y la cátedra de esta ciencia milenaria era impartida por un profesor centenario. Su nombre era algo así como Roberto Rodríguez... y producto de su avanzada edad era conocido como "el tata Rodríguez".

Y así yo iba a clases todas las semanas con el Tata Rodríguez. Pese a que estamos hablando de inicios de esta década, el Tata Rodríguez hacía sus Controles con máquina de escribir, por ejemplo. Todo era sumamente rudimentario... e igual era extraña esa sensación de estar sentado frente a un Control con un ejercicio tan cabrón que no lo puedes resolver y que esté hecho con máquina de escribir.

Una vez le comenté a un amigo, Ingeniero Civil de la misma facultad, que tenía clases con el "Tata Rodríguez".

"Ahh... el Tata Rodríguez, Ricardo Rodriguez" me dice.

"No" le digo... "Roberto Rodríguez".

"No, se llamaba Ricardo Rodríguez" insiste mi amigo.

"No. Te refieres al profesor de Ingenería, viejito, buena onda, el Tata Rodríguez" le digo.

"Sí, ese mismo. Bah, yo recordaba que se llamaba Ricardo, pero en fin, da lo mismo". Fin de la conversación, todo OK, pequeño malentendido, los dos habíamos tenido clases con el mismo Tata Rodríguez, Roberto Rodríguez.

Pero la realidad supera a la ficción... y a mí igual me quedó dando vueltas esto de la confusión entre Roberto y Ricardo Rodríguez. Hasta que un día lo vi.

Iba yo caminando por San Joaquín (cerca de la sala N16 para los entendidos) cuando de pronto vi al Tata Rodríguez, caminando feliz de la vida por San Joaquín pese a tener cerca de 90 años... Pero lo que vi ahí me dejó perturbado.

Mi profesor, el supuesto Tata Rodríguez, iba acompañado de otro viejo. Un viejo aún más viejo. Con menos pelo. Y más blanco... y más encorvado. Con los mismos anteojos. Este otro anciano también era profesor de la UC... y tenía un extraño parecido a mi profesor!

Y claro, porque el "Tata Rodríguez", que en realidad no lo era, iba acompañado por su HERMANO GRANDE quien, obviamente, era el auténtico Tata Rodríguez. Así es. Mi profesor tenía un hermano más grande, muy parecido a él, que era el verdadero "Tata Rodríguez".

Yo quedé en shock. Insólito. Mi profesor, anticuado y enchapado a la antigua, con sus Controles a máquina de escribir y que con su mano temblorosa dibujaba vectores en la pizarra era en realidad el hermano chico del Tata Rodríguez... y como ven, todo esto iba mucho más allá de un alcance de nombres.

Le conté a mi amigo que tenía razón. Que yo en realidad no había tenido clases con el "Tata Rodríguez". Y seguí yendo a clases con el hermano chico del "Tata Rodríguez", pero no podía dejar de pensar cómo sería tener a un profesor aún más viejo.

Tan viejo como el auténtico "Tata Rodríguez". Nunca lo sabré.

1 Comments:

Anonymous Anonymous said...

MALDICION! ¿¿Entonces mis bendiciones para el "Tata" Rodríguez, que me regaló Racional II allá por el año 93, no fueron para EL "Tata" sino que para su hermano??.
Robert, me mataste. Has matado uno de los pocos mitos urbanos que formé en torno al carma de Mecánica Racional!

10:58 AM  

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